La anteúltima vez que me atiende Graciela

Hoy el clima a la mañana estuvo muy placentero mas caminando al hospital municipal. Como hace mucho sigo yendo caminando. Esta vez tuve que ir hoy miércoles ya que me aviso Graciela (psiquiatra) que ayer martes no me podía atender, ya que no iba a estar, pero al final estuvo atendiendo.

Lamentablemente Graciela no va a atender mas en el hospital, creo que tiene un contrato cada 4 años y que esta semana es la última que atiende. Me va a derivar a otro doctor. Tendría que haber ido ayer y encontraba a Defina (psicóloga) que hace mucho que no la veo y arreglaba con ella. De los que me atendieron solo queda Delfina.

Nota: A Graciela la vi muy delgada. Le lleve un chocolate de marca, se puso muy contenta, ama el chocolate.

Al subir escalones

Quien sube un escalón quiere subir otro. Es aquel concepto del teórico italiano Norberto Bobbio, el "mínimo civilizatorio", lo que se pone en juego, aquel reclamo que hacen los ciudadanos a las instituciones bajo el imperio de sus necesidades, que, naturalmente, van cambiando. Y están las secretas aspiraciones que siempre impone el deseo ante lo que nos falta. Por ejemplo, el dinero. Por ejemplo, la ilusión.

Fuente: ¿Dónde queda el Primer Mundo? El nuevo ranking de países admirados.

Humor gráfico machista

Fuente: Google imágenes.

Días fríos antes del invierno

Esta llegando el invierno y el frío se esta haciendo sentir. Al final esta semana no fui a ver a mi psiquiatra, seguramente lo haré la próxima semana ya que todavía tengo una receta y media cajita de medicación.

Le envié un mensaje de texto a Delfina (psicóloga) que me atendió durante mucho tiempo pero esta vez no tuve respuesta y no sé si el próximo martes va a estar atendiendo en el sector de salud mental. Desde que se fue Mariela (psicóloga) del hospital municipal tuve una sesión de terapia. Muy poco y eso que el tratamiento tiene dos "patas" o sea medicación y terapia.

Nota: Congelándome.

Frases de una imagen

Ser Feliz
 

Llega un momento en la vida, en que debes alejarte del drama sin motivo y de la gente que lo provoca, rodeándote de personas que te hacen reír tan fuerte que de olvidas de lo malo y te enfocas solo en lo bueno; que te tratan bien porque te quieren y arreglan las cosas hablando. La vida es demasiado corta para ser otra cosa que no sea ser feliz. Sumemos gente que piense en POSITIVO.

Fuente: Una imagen de Internet.           

Semana lluviosa

Veremos si la semana que viene voy a ver a Delfina (psicóloga) y a Graciela (psiquiatra). Todavía tengo una cajita casi llena de comprimidos de Clozapina y una receta para el mes que viene así que para ver a Graciela tengo tiempo. Me hace 2 recetas para 2 meses.

Este año la vi muy pocas veces a Delfina luego de que volvió a atender tras su licencia por maternidad. A Mariela (psicóloga) menos ya que se fue a atender a otro lugar que le conviene mucho mas, además de adquirir la experiencia necesaria en el hospital municipal.

En los últimos 4 años y medio solo fallé en ir al hospital municipal una vez y por razones ajenas a mi voluntad. Justo el día que Mariela iba a atenderme por última vez.

Nota: Continuando.

Dinero, decisiones racionales y emocionales

Conclusión

Los experimentos antes descriptos muestran como, bajo determinadas circunstancias, las personas actúan de una manera totalmente distinta a lo que dicta la economía racional, y muchas veces en contra de sus propios intereses, ponderando aspectos que no son tenidos en cuenta en esa escuela de pensamiento, como la ambición desmedida y luego el miedo, el "sesgo presente" o el "efecto anclaje".

Ello demuestra que cuando se trata de gastar, ahorrar o invertir, nuestro accionar está bastante alejado de lo que dictan los modelos matemáticos con los que fueron escritos la mayoría de los libros de economía: experimentamos en el día a día miedos, alegrías, celos, ambiciones, codicia y muchos otros sentimientos no "cuantificables" ni generalizables que influyen en la decisión final.

Lo dicho establece un cambio de suma importancia que podría explicar "anomalías" económicas que no encuentran razones dentro de las escuelas tradicionales.

El racionalizar las situaciones para luego decidir parece no ser suficiente para entender la conducta económica de los individuos. Ganará dinero (y poder) aquel que sepa entender nuestras emociones y no nuestra racionalidad en lo referente a la relación con el dinero.

Fuente:  Decisiones racionales y emocionales para el manejo del dinero.