jueves, 18 de septiembre de 2008

Sin poder dejar el tratamiento

El Lunes pasado me hice bastante mala sangre, realmente quería dejar de tomar las pastillas como también el tratamiento. En parte dejé de ir a la psicóloga en mutuo acuerdo con ella en lo cual quedamos en que iba a ir a la consulta cuando sienta que la necesito. Me quedaba las pastillas que no puedo dejarlas de un día para el otro, el Lunes pasado tuve turno con el psiquiatra e iba a ser mi posibilidad de dejar el tratamiento entero pero no era tan fácil. El psiquiatra me tenía que decir cómo era el método correcto de dejar la Risperidona que vengo tomando desde hace 9 meses pero no se negó a hacerlo y dejó en claro los roles de cada uno ó sea él psiquiatra y yo el paciente a lo cual le respondo que lo iba a dejar igual (en ocasiones soy impulsivo). Iba a dejar la pastilla de un día para el otro pero me falto valentía para hacerlo y hacerme responsable de los resultados pero al pensarlo bastante tiempo comprendí que no podía dejar un tratamiento a la mitad y que tenía una obligación de cumplirlo pese a lo caro y molesto del mismo.
No sé si es ético no informarle al paciente antes de empezar un tratamiento como va a ser el mismo y los plazos como la forma de realizarlo. En mi caso no me dijeron nada (cosa que me parece mal) solo lo superficial ó sea me dieron las pastillas que antes eran dos combinadas y que debía seguir el tratamiento en el hospital cercano.
En un plazo cercano tendré que volver a hablar con la psicóloga para que me dé un turno y volver al tratamiento aunque me sienta incómodo y no me guste, por lo que llevo de experiencia noto que es un tratamiento largo y lento. Como me arrepiento haberlo empezado.

martes, 9 de septiembre de 2008

Viendo a mi sobrino crecer

Ayer tuve que ir a visitarlo de nuevo, se murió una Tía del papá y no querían dejarlo solo así que me llamaron para que esté unas horas con él, lo vi bien con el pelo glam de los floggers que esta de moda y dedicándole mucho tiempo al fotolog. No entiendo como puede estar tantas horas diarias en Internet y su página, le digo que le hace mal y que debe dedicar un poco más de tiempo al estudio y menos al PC pero como esta solo no puedo controlarlo mucho.
Cuando venía a casa era distinto, estaba más con sus tareas y el deporte en especial el fútbol cuando iba al club y luego me contaba los goles que hacía como jugadas y demás cosas. La computadora que tiene lo alejo de esas cosas que le hacían bien para quedarse sentado frente a una máquina gran cantidad del tiempo al día dejando sus estudios un poco lado. Últimamente retomo las buenas notas pero se dejo estar gran parte del año.

Cuando entre a la casa note la puerta rajada a patadas del asalto que sufrieron hace unas semanas, tuvieron suerte de que no estaban cuando se produjo el robo, le fueron directamente a la habitación y revolvieron todo hasta encontrar la recaudación de todo un mes de trabajo. Mi hermana se quería morir al enterarse, por suerte no les paso nada a ellos. Ahora están tomando las medidas de precaución necesarias para que no vuelva a pasar.

Con respecto a cuidar a mi sobrino ya no es difícil, se queda en la PC tranquilo mientras cocinaba y preparaba las cosas para que coma. Hablamos un poco y luego se fue a dormir cansado, estuvo desde temprano despierto y activo en la PC muchas horas. No hay mucho que contar sobre eso, antes si que había que entretenerlo ya que era bastante inquieto. Como se pasa el tiempo, es increíble que pararán 13 años desde que lo tuve en brazos.
Me gustan los chicos, hacerles de comer, entretenerlos, ponerlos contentos y cuidarlos. Creo que en el futuro sería un buen padre.

martes, 2 de septiembre de 2008

Postergando al psiquiatra

Tendría que haber ido al Hospital Municipal para poder buscar y/o encontrar al psiquiatra que me viene atendiendo pero como solo me hace unas preguntas y me da un par de recetas algo que todavía tengo no fui, lo dejo postergado además no tengo turno y tampoco sé si cuando vaya lo voy a encontrar. Me hice bastante problema y todo porque faltó sin aviso el día del turno. Todavía tengo pastillas para 15 días y una receta más para 20 días, en total son casi 35 días en los que puedo seguir postergando la visita al psiquiatra cosa que no voy a hacer. Como mucho voy a ver si lo veo el próximo lunes para comunicarle que quiero dejar de tomar las pastillas y me diga el método correcto para hacerlo.

Todavía me quedan muchas cosas por hacer pero siento que siempre que emprendo algo todo me juega en contra ya sea laboralmente como en proyectos y relaciones. Se hace pesado con el tiempo y a uno no le dan ganas de volver a empezar nada por prever que siempre se da el mismo resultado. Eso que insistí y le puse toda la voluntad, energía, ilusión pero por más que insista siempre hay obstrucciones que impiden que siga adelante y ya estoy cansado de esas cosas. Con el tiempo mi tolerancia al fracaso fue disminuyendo como también mi voluntad para emprender proyectos nuevos.