Por suerte el clima estuvo agradable. Como siempre llego
una hora más temprano al hospital municipal para hacer el hemograma que por
ahora siempre dio buenos resultados. Tuve que esperar bastante pero tardo lo
esperado en dar los resultados.
Es la última vez que me atiende el psiquiatra Pablo, cada
vez que me acostumbro se van, tienen un contrato de 4 años. Luego bajo con los
resultados a salud mental a esperar el psiquiatra, tardo cerca de 45 minutos
después de la hora del turno. Se disculpó por la tardanza e hizo rápido el
turno para el próximo psiquiatra mas la orden para un hemograma nuevo y las
recetas para la medicación. En la espera estuvo un paciente con problemas de
salud y mentales, según escuche tiene problemas con las drogas y no le surten
efecto la medicación. Se nota lo destruido que estaba. Algunos parecen zombis
principalmente los que van a los talleres. No creo que se recuperen y si lo
hacen quedan dañados irreversiblemente aunque puedan parecer "sanos".
El tránsito de la cuidad estuvo caótica desde temprano,
manejan muy mal además de ser peligrosos. Siempre es estresante. Encima cuando
vuelvo a casa veo la sorpresa que la puerta tiene una cerradura rota que rompió
mi viejo al salir. Tuve que esperar como media hora hasta que pudo desatornillar
el fiero que engancha la cerradura. Hay que comprar una nueva. Mi viejo tuvo
que entrar desde el balcón para ver si podía abrir desde adentro. Por suerte en
encontrar a alguien con escalera cerca de casa.
Nota: Volviendo a publicar.