Cada vez que tengo turno temprano hace un frio de morirse, por suerte me salva el auto sino el camino se padece. Pensé que iba a tardar mucho como hay más gente que a la tarde pero no, los resultados del hemograma salieron enseguida cerca de 5 minutos eso si el pinchazo dolió como pocas veces. El nuevo psiquiatra que me va a atender por un año se llama Joaquín. Me llamó a horario (09:00), un buen detalle. Buen trato y una serie de preguntas, lo veo una vez por mes como cuando me veía el anterior psiquiatra.
La sorpresa fue ver a Delfina, mi antigua psicóloga,
estaba linda hablando con sus colegas en el área de salud mental. No la quise
molestar, en la próxima la saludo. Es muy bajita. De las primeras que me
atendió en el año 2007, pasaron más de 10 años. Varias veces se tomo licencia
por maternidad y me iba derivando sucesivamente. Seguro tiene como 3 o 4 hijos.
Afuera había gente del municipio quejándose de los sueldo
basura. Aumento del 22% en cuotas, un desastre. Nunca vote al intendente, como
casi la mitad de la ciudad. Igual gano y sigue como siempre.
Nota: Escribiendo con las manos frías.